Y mi mejor amiga se casó!

Hola a todos! ¿De puente? Yo terminando la semana con un post muy especial para mí. La boda de mi mejor amiga, Miriam.

Boda Miriam y Rafa. Fotografía: Bolet Produccions.

Todo empezó una tarde de Julio, en la que yo estaba tirada en el sofá viendo la típica peli chorra de Antena 3, cuando recibí una llamada de Miriam (una de mis tres chicas de la uni). Su tono de voz al contestar me lo dijo todo, Rafa le había pedido matrimonio! Y el chico se lo había preparado mejor que bien, ya que le pidió que se casaran de la manera más romántica y flamenca posible. Ni más ni menos que a Sevilla se la llevó, le tapó los ojos, la subió a una terraza espectacular, y bajo la atenta mirada de la Giralda (con música y cantante en directo), le pidió que pasaran el resto de su vida juntos. La respuesta de Miriam ya os la imaginas… 

Como no pudo ser de otra manera, Miriam y Rafa me comentaron que les encantaría que yo fuera la que les echara una mano en el tema del baile. Por supuesto, a mí me hizo una ilusión enorme y acepté encantadísima, con mil ganas de empezar cuanto antes. 

La boda era en Septiembre, así que a finales de Julio comenzamos con la elección de la música. Nos costó un poquito ya que su canción (de pareja de siempre), era muy poco bailable y ya aparecía en otro momento de la boda, no era plan de repetirla. Por eso al final nos decidimos por un mix lento/marchoso de dos canciones, “Fix you” en una versión preciosa de Boyce Avenue para la parte romántica, y la canción de moda de este año “Want to want me” de Jason Derulo para la parte más movida.

Boda Miriam y Rafa. Fotografía: Bolet Produccions.

Practicamos durante tres sesiones que fueron realmente productivas y en las que los novios, sin haber dado ninguna clase de baile anteriormente, cogieron muy rápido los pasos. Pero en el cuarto ensayo notamos que algo pasaba en el novio, que no estaba todo lo ilusionado que esperaba con el baile. Así que fue tarea de su chica averiguar qué le pasaba, y lo cierto es que lo acertó a la primera (se notó que se conocen muy muy bien). Y es que Rafa tenía una canción guardadita de Sabina, cantautor del que es fan incondicional y con la que la pareja se identifica mucho. Sólo que se lo había tenido guardado porque quería darle una oportunidad a una de las canciones favoritas de Miriam. En cuanto ella me lo comentó no me lo pensé, teníamos que hacer la canción con la que los novios se sintieran más “ellos”. De manera que decidimos arriesgar, y así fue como a dos días de la boda cambiamos radicalmente de canción y de baile.

Y el día de la boda llegó. Desde recién entrada la tarde estuvimos (mi chico y yo) en casa de la novia para no perder detalle de su gran día. Cuando llegamos, la novia estaba espectacular, y eso que todavía no llevaba el vestido de la magnífica tienda de Rosas Rosa (Raimon Bundó). Además el tocado de El Jardín de Mamá Ana en color rojo, el color de Miriam, era precioso y le daba un estilo muy personal a todo el look. Sin olvidarnos de los zapatos, que se los hicieron a medida en Sole Piel, y con los que aguantó sin problemas hasta la madrugada.

Boda Miriam y Rafa. Fotografía: Bolet Produccions.

Una vez en la iglesia asistimos a una bonita ceremonia muy emotiva, en la que los novios se dieron el sí quiero y en el que todos acabamos llorando (soy una ñoña). Tras la ceremonia, el banquete se celebró en una pintoresca masía de Carlet. La noche estuvo llena de sorpresas y alegría por todos lados y el baile salió según lo previsto. Los novios disfrutaron como niños bailando a Sabina, y todos los invitados quedaron sorprendidos y con el resultado final y el romanticismo de la escena.

Boda Miriam y Rafa. Fotografía: Bolet Produccions.

Desde aquí les quiero agradecer la MAGNÍFICA boda que hicieron pensado en que nosotros, los invitados, disfrutáramos con ellos de ese día tan especial, en el que no paramos de reír, llorar, comer, beber, saltar y bailar durante toda la noche.